Estos avances tecnológicos han modificado considerablemente todos los ámbitos de nuestras vidas y tienen su relación en el mundo laboral. Según datos del Foro Económico Mundial (2016), el 65% de los niños y niñas que actualmente están incorporándose al sistema educativo, se desempeñarán en el futuro en puestos de trabajo que todavía no han sido creados.
En este sentido, resulta necesario que nuestras instituciones educativas se transformen en escenarios desde donde se construya conocimiento, basado en las nuevas formas en la que los estudiantes se socializan y aprenden, que les permitan responder a las exigencias y necesidades de esta sociedad del siglo XXI.
En consecuencia de lo anterior, diversos países han incluido ya a la robótica dentro de sus planes de estudios, por su incidencia para el despliegue de habilidades como el desarrollo del pensamiento lógico, la capacidad de abstracción, la resolución de problemas y el pensamiento creativo, entre otras.
Fieles a nuestra misión, la Junta de Beneficencia trabaja arduamente para brindar a la sociedad una educación de calidad, bajo ese lineamiento y respondiendo a las exigencias educativas de este milenio, hemos optado por incluir la materia Robótica en todas nuestras instituciones educativas desde el nivel inicial.
La robótica educativa integra la ciencia, tecnología, ingeniería, el arte y la matemática (STEAM) en el aula y resulta fundamental si queremos brindar una educación de primer nivel, puesto que con ella se pueden abordar diversas estrategias y metodologías, tales como la gamificación, el aprendizaje basado en retos, el aprendizaje basado en proyectos, etc., que favorecen el proceso de enseñanza-aprendizaje en los estudiantes.
Entre los beneficios de la enseñanza de la robótica, podemos destacar los siguientes:
• Incrementa el nivel de concentración de los estudiantes. Al interactuar con robots y piezas electrónicas y al incluir los retos, la gamificación y otras estrategias propicias para la enseñanza de la robótica, los estudiantes se sienten motivados y mejoran su concentración.
• Desarrolla la creatividad. A través de la enseñanza de la robótica, se desarrolla considerablemente la creatividad de los estudiantes, no solo al momento de diseñar una solución con el uso de diferentes componentes electrónicos, sino también en el desarrollo de la codificación necesaria para que dichos componentes puedan realizar una determinada tarea y solucionar un problema específico.
• Fomenta el trabajo cooperativo, la comunicación y la toma de decisiones. El trabajo en grupo es fundamental dentro de la robótica, lo que permite desarrollar en los estudiantes, habilidades de socialización y trabajo en equipo, en la que cada uno asume un rol, entendiendo sus responsabilidades y comprendiendo a la vez la importancia del trabajo de todos los miembros del grupo, para la consecución del objetivo planteado.
• Permite el desarrollo del pensamiento crítico, lógico y computacional. Mediante la enseñanza de la robótica, podemos desarrollar en los estudiantes habilidades que le permitirán analizar un problema y obtener soluciones mediante el uso de softwares o dispositivos computacionales.
• Acorta la brecha tecnológica. Si bien es cierto que el uso de robots no es una novedad, en nuestra sociedad latinoamericana, el acceso a dicha tecnología es exclusiva para niveles socioeconómicos altos. Con la enseñanza de la robótica educativa, logramos acortar dicha brecha, en la medida en que el estudiante puede interactuar con diferentes componentes electrónicos y conocer su funcionamiento en la vida cotidiana.
Estamos seguros de que, con la implementación de la materia robótica, contribuiremos significativamente a desarrollar en nuestros estudiantes competencias tecnológicas, habilidades blandas y de STEAM respondiendo de esta manera a las necesidades de los estudiantes de mantenerse competitivos en la cuarta revolución industrial.